CSJ DESMIENTE A EL NUEVO DIARIO

Licenciado

FRANCISCO CHAMORRO

Director

EL NUEVO DIARIO

Su Despacho

Estimado Licenciado Chamorro:

Como parte de la nueva Política de Comunicación del Poder Judicial, que entre otras cosas establece una relación abierta con los medios de comunicación para informar a la población del quehacer de este poder del Estado sin ocultar los problemas que enfrentamos, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia, doctora Alba Luz Ramos Vanegas, brindó a finales del año pasado una entrevista a la periodista Martha Vásquez, de El Nuevo Diario, sobre las iniciativas en desarrollo para implementar un sistema moderno de organización y funciones de gestión de recursos humanos en el supremo tribunal.

En esa entrevista, la presidenta de la CSJ presentó a la periodista de END el contenido del documento titulado “Diagnóstico Organizacional del Área de Recursos Humanos de la Corte Suprema de Justicia”, elaborado por la compañía Xolo, Sistemas y Servicios de Información, S.A., mediante una consultoría financiada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Sobre la base de este documento, en la entrevista se abordaron amplia y francamente los problemas que enfrenta el Poder Judicial en materia de gestión de sus recursos humanos y se informó del proceso de reingeniería que se implementará a partir de este año con el objetivo de resolver dichos problemas, reordenando el aparato administrativo y fortaleciendo el área jurisdiccional para mejorar el servicio de administración de justicia.

Sin embargo, una vez más nuestra política de transparencia y apertura hacia los medios, ha chocado con la barrera de lo que pareciera ser una actitud de ataque constante contra la institucionalidad de este poder del Estado por parte de El Nuevo Diario, a juzgar por las publicaciones del pasado fin de semana en cuyos titulares nos acusan: “CSJ poblada de fantasmas y supernumerarios” y “CGR vuelve a ver para otro lado”.

Al respecto debo recordar a END que una de las primeras acciones en el orden administrativo que tomó la presidenta de la CSJ fue la de despedir a un numeroso grupo de empleados fantasmas que habían sido contratados por la administración anterior de este poder del Estado, lo cual fue ampliamente informado por su periódico. En ese sentido debo recordarle la nota publicada por END el 6 de Julio de 2010 firmada por la periodista Matilde Córdoba con el título “Ramos “barre” con el personal de Manuel Martínez” con el subtítulo “Despedidos, según comunicado, eran “fantasmas” de altos salarios” y la del día siguiente 7 de Julio de 2010 firmada por el periodista Luis Galeano, titulada “CSJ: fuente de corrupción liberal-orteguista” y subtitulada “Administración de Alba Luz Ramos canceló contratos de empleados “fantasmas”, algunos de ellos familiares del ex presidente y ex reo Arnoldo Alemán”. Asimismo debo recordarle la publicación de END del día 12 de Agosto de 2010 y firmada por el periodista Rafael Lara, con el título “Barrida masiva de empleados en la Corte Suprema”, acompañada además con fotografías y declaraciones de los afectados.

Es decir, las publicaciones del pasado fin de semana de El Nuevo Diario informan sobre una situación hace tiempo superada en este poder del Estado, lo cual no podemos interpretar más que como parte de la misma campaña de descrédito y ataque a ultranza contra la institucionalidad del Poder Judicial.

La manipulación y el falseo de la verdad se demuestra cuando en las publicaciones de los últimos días se cita un documento titulado “Diagnóstico situacional del capital humano del nivel central del Poder Judicial” elaborado a comienzos de 2009, es decir, hace ya dos años, por la misma magistrada Ramos y el magistrado Marvin Aguilar, el cual ha sido superado y actualizado con los resultados de la consultoría financiada por el BID, a que hago referencia al inicio de esta carta y la cual a propósito ha ignorado el diario.

En la Corte Suprema de Justicia ya no existen los “fantasmas” ni los “semi fantasmas” mencionados en ese diagnóstico situacional que al parecer quiere “resucitar” END con el objeto de mantener su campaña de descrédito contra este Poder del Estado. Por respeto a sus lectores y en honor a la verdad, le ruego publicar esta nota con el mismo despliegue con el que fueron publicados los infundios.

Aprovecho para saludarle.

Atentamente,

ROBERTO LARIOS MELENDEZ

Director de Relaciones Públicas